"...EL PUEBLO HABLA Y MANDA..."

En nuestra historia pesa la traición de Francisco de Paula Santander contra el Libertador Simón Bolívar, quien murió por la libertad y la unidad de nuestros pueblos. La burguesía naciente pretendió acabar su proyecto matando a nuestro padre de la libertad. Esta élite criolla nació pro-imperialista. Esta traición de la minoría, se ha escondido en cultura política de la clase en el poder. Los dos partidos tradicionales, liberal y Conservador, jamás han representado el interés nacional; si defienden sus privilegios de élite y del capital foráneo. Por ello, desde hace más de dos siglos, la protesta está en el Código Genético Político de la Sociedad Colombiana en Resistencia. Jamás pensemos que el Proyecto de Paz y Constitución de Comunidad Nacional venga de la voluntad de la oligarquía; ha sido esa minoría quien ha impedido la unidad e identidad nacional, que resuelvan las transformaciones aplazadas para la mayoría de la población colombiana. Cada vez que surgen Organizaciones Populares con un proyecto alternativo de País, la oligarquía trata de combatir y evitar que madure su propósito y que esas fuerzas se conviertan en huracán político, que haga temblar las instituciones desgastadas de la clase dominante.

NO QUEREMOS MÁS RESPUESTAS MILITARES A LOS PROBLEMAS SOCIALES

Nos quieren imponer la guerra y la cultura mafiosa, nos quieren acostumbrar a que sobrevivamos dentro de ellas toda la vida, pero el pueblo exige la Paz. Por eso, el Pueblo se levanta, recobra la dignidad junto a sus valientes líderes Comunales, Estudiantiles y dice ¡basta!
Se ha impuesto la pena de muerte de facto, es una costumbre de la institucionalidad oligárquica, tanto con los opositores como de los ingenuos, inocentes y humildes. Las cifras lo dicen todo: Colombia es el país con el mayor número de desplazados y desaparecidos del planeta; donde más sindicalistas son asesinados cada año; donde el principal gasto del presupuesto nacional es para la guerra: donde el pueblo es tratado, como el enemigo interno. Se vive en un conflicto social y armado que se niega, pues el régimen trata todos los problemas como de orden público, dando salidas militares a las necesidades sociales. Tal es el caso de la persecución a los Vendedores Ambulantes, que constituyen la mayoría de los 6,5 millones de trabajadores temporales; también el de los 1,3 millones de Pequeños Mineros que son declarados Ilegales. Los cocaleros son tratados con fumigaciones y desplazamiento. Los Estudiantes, defensores de los Derechos Humanos son tratados como Terroristas, igual los Periodistas Honestos que han tenido que refugiarsen en otros Países por que aquí la orden era asesinarlos. Todos los de la oposición para la élite somos terroristas.

NO MÁS INTERESES FORÁNEOS EN COLOMBIA

La "seguridad democrática" es el resultado de la alianza de la oligarquía, con las fuerzas emergentes de las mafias y el narco paramilitarismo, para la instauración de un narco Estado. Álvaro Uribe Vélez postró al país entero de rodillas; de la misma manera, cómo se postró de de rodillas ante los Norteaméricanos y seguir siempre en la misma posición de genuflexo. Esta es la herencia que recibió Júan Manuel Santos Calderón, actual presidente de los Colombianos. Se entregaron las bases militares al imperio, pero gracias a la Corte Constitucional se logró detener esto. Y lo más grave es que cómo no hay ningún respeto por las Normas Constitucionales, ahora las bases siguen su operación con apoyo del Gobierno y lo más seguro es que todo quede en total impunidad cómo sucede con todas las anomalías en nuestro País. Esta oligarquía no tiene respeto por la Soberanía Nacional ni cuida los Recursos Naturales y Energéticos, por lo tanto prefiere entregárselos a las multinacionales para su despojo y saqueo. La justicia es acusatoria, impuesta por la Norteaméricana, por lo que los Colombianos perdemos el derecho a la presunción de inocencia; todos somos sospechosos y la ciudadanía se perdió. Hay más de 7.500 presos políticos y más de 1.500 compatriotas han sido extraditados hacia los Estados Unidos.

EL PROTAGONISTA DEL CAMBIO ES EL PUEBLO

El “estado de opinión” es un falso populismo, donde 21 millones de Colombianos, que no votaron o no están de acuerdo con el régimen, cuentan menos que los 9 millones que votaron. Así, el régimen supuestamente es legal, pero ilegítimo. La libertad de pensamiento sólo existirá con la posibilidad de pensar distinto; donde la palabra del pueblo raso se escuche, valga y se tenga en cuenta. El régimen pretende convertir a cada ciudadano en un enano moral, incapaz de controlar las nuevas esclavitudes, que le colocan un precio a cada uno, como es el caso de las "familias guardabosques", las "familias en acción", "las redes de soplones", entre otras. Ante problemas propios de países de baja institucionalidad, donde priman la corrupción, el clientelismo y la impunidad; como los problemas de vivienda, salud, desempleo, educación, violencia y genocidio; la misión de los cambios y transformaciones está en manos del pueblo. El pueblo tiene en sus manos la decisión de mandar, para realizar los cambios y transformaciones inaplazables. ¡El pueblo habla y manda! y ahí están los ejemplos de los Países Árabes, donde el pueblo se alzó para reclamar sus Derechos, ya cansado de tanta opresión, de tanta corrupción y cuanta cosa mala existe en el mundo neoliberal y aplicado por estos lacayos del imperio a sus comunidades. La segunda revolución está en camino, y es la que nos salvará de todos estos imperialistas. No hay que olvidar que "LA VOZ DEL PUEBLO ES LA VOZ DE DIOS".

(mayúsculas y negrillas y algunos ajustes son del titular del Blog)